Dos Palabras, Miles de Acciones

“Estaba repitiendo sus dos palabras secretas, como hacía cada vez con mayor frecuencia. Las decía cuando lo ablandaba la nostalgia, las murmuraba dormido, las llevaba consigo sobre su caballo, las pensaba antes de pronunciar su célebre discurso y se sorprendía saboreándolas en sus descuidos.” Isabel Allende, Dos Palabras

 Siempre la idea de las palabras me ha fascinado porque palabras solamente son cosas que crean imágenes en nuestras mentes con el fin de que actuemos. En realidad, palabras no significan nada, pero nos proporcionan una idea que hace que sintamos emociones y que formemos una opinión de algo. Con el coronel, las palabras que le dijo Belisa hicieron que sintiera emociones por ella, aunque él no sentía así antes de que las escuchara. Las palabras tienen un poder enorme y se manifiesta en libro clásico que se tiene que leer en la escuela.

            Cuando yo estuve en séptimo básico, yo tuve que leer un libro por Luis Lowry que se llama The Giver. Ese libro se trata de que en el país donde viven todos los habitantes, hay uno que se llama The Receiver. Él es muy sabio y ayuda a muchos de los habitantes a resolver sus problemas por medio del conocimiento que tiene.   

En el libro, un joven es destinado ser The Receiver cuando el otro se muera y como resultado, el joven tiene que conversar con The Receiver todos los días para prepararse. Ya que en el país, no existe dolor, guerra, soledad, etc., viven en un mundo ‘mundo’ perfecto  Pero, las memorias de guerra y del dolor se están volviendo a acordar, y los habitantes no saben qué hacer. Bajo su responsabilidad, el nuevo Receiver necesita decidir lo que hay que hacer para resolver el gran problema porque se les transforma el mundo como los habitantes lo conocen. Entonces, como resultado, cambian completamente la manera  en que piensan y que actúan.

            Las memorias y las palabras en este contexto proveen imágenes para nuestras mentes. Tal como sucede en Dos Palabras, las personas reaccionan de una manera muy extraordinario y empiezan a actuar diferente. Ése es el efecto que tienen las palabras y las memorias que vamos recordando y guardando. Ahora, las personas que llegan a ser expertos con las palabras, según Isabel Allende y Lois Lowry, pueden manipular y poner cualquier imagen en la mente de cualquier persona que les escuche, lo cual los llevará a actuar como quieran que actúen.

            La forma en que actuamos afecta directamente la persona que somos, y actuamos por medio de nuestra interpretación de las palabras que se nos presenten, es decir, las palabras y memorias afecta quiénes somos.